Nuevo Laredo, Tamaulipas.- Un grupo de 24 oficiales de la Policía Estatal Acreditable (PEA) en Nuevo Laredo, se encuentran inmovilizados desde el 17 de febrero, los desarmaron y tiene la amenaza de ser dados de baja por la Secretaría de Seguridad Pública del Estado.

Debido a ello se congregaron hoy en las instalaciones del edificio de Seguridad Ciudadana en esta frontera, para manifestar su inconformidad por el trato que han estado recibiendo, luego de que recurrieron al amparo para no ser transferidos a otras ciudades del Estado.

Bernarda Tavera Cázares, en el papel de vocera del grupo policial, informó que el delegado regional de la PEA, Edgar Vallejo Erosa, ni siquiera los ha recibido para que les informes de su situación laboral, “nos ignora, se pasa de frente cuando tratamos de abordarlo”.

El grupo de agentes, del turno matutino, pasaron un curso de capacitación de seis meses, además pasaron por varios filtros y fueron certificados, lo que les permitió que firmaran un contrato de trabajo, en el que se especificaba que su base de trabajo sería Nuevo Laredo.

Relató que recientemente fueron enviados a Ciudad Victoria para hacer su cambio de gafete y no les comunicaron que serían cambiados de plaza, además les ordenaron regresar a Nuevo Laredo y esperar los oficios en los que se les indicarían las ciudades a las que tendrían que ir a laborar.

Explicó que con la asesoría de un abogado decidieron solicitar un amparo de la Justicia Federal contra la transferencia.

El problema hizo crisis el pasado viernes, dijo, cuando por la mañana se presentaron a trabajar y salir a patrullar y fue entonces cuando los regresaron, les quitaron el equipo y que tenían que esperar indicaciones; los 24 elementos están uniformados pero inmovilizados.